Quien hace el Camino de Santiago no puede pasar sin degustar el tradicional pulpo a la gallega o pulpo á feira (en gallego polbo á feira). Es un plato tradicional de Galicia que se ha extendido por toda España.
Preparación
El pulpo limpio se cuece entero durante algún tiempo y a poder ser en una olla de cobre. Suele servirse en platos de madera acompañado de diversos palillos a modo de tenedor. Está presente en las fiestas, ferias y romerías preparado por las “polbeiras”. De ahí la denominación pulpo “á feira”.
A la hora de cocer el pulpo existe la técnica que se conoce como “asustar” y ayuda a que conserve su piel una vez que esté cocido. Consiste en introducir en el agua hirviendo durante escasos segundos al pulpo y repetir la operación tres veces.
Tras la cocción se corta con unas tijeras en rodajas de un centímetro aproximadamente de grosor para después espolvorear pimentón picante, aceite virgen extra y sal gruesa. También es frecuente acompañar con patata cocida y pan. Para beber una de las mejores combinaciones es el vino tinto.
Todo ventajas
Uno de los alimentos más saludables que hay es el pulpo porque apenas tiene grasa y destaca por su alto contenido en minerales especialmente en zinc que es un nutriente fundamental para el mantenimiento de las defensas. Además, tiene hasta 9 vitaminas y casi nada de colesterol. Otro beneficio más es que se puede comer todo: cuerpo y tentáculos.
En el restaurante de Mercadoiro podrás degustar un auténtico pulpo á feira con espectaculares vistas a la montaña. Estamos en Paradela, en el corazón de la Ribeira Sacra y entre las etapas de Sarria y Portomarín del Camino Francés.