Quizás hayas llegado a esta página buscando razones de peso para hacer el Camino de Santiago. Puede que estés en ese momento en que te planeas vivir esta experiencia y ser un peregrino más. Como todo principiante surgen varias dudas, pero lo principal es tener claro por qué será positivo peregrinar a Santiago de Compostela.
Seguro que en más de una ocasión has escuchado de quien lo realiza que es una vivencia que engancha. Sin embargo, hoy queremos ir más allá y recopilamos motivos por los que se debe apostar por el Camino de Santiago:
Conocerte mejor
Algunos peregrinos emprenden camino por motivos religiosos, pero también hay quien únicamente espera encontrar a su “yo” espiritual. No obstante, todos tienen en común el llegar a conocerse mejor a sí mismos. Sin duda el Camino de Santiago es un lugar perfecto para reflexionar y autoanalizarse.
Salir de la zona de confort
Al tener una rutina diaria no ampliamos nuestra perspectiva de la vida. Por ello al hacer una ruta jacobea en un entorno diferente al de nuestro día a día nos pondrá al límite y cambiará el orden de nuestras prioridades valorando mucho más diferentes aspectos.
Aprender a relativizar
O lo que viene siendo lo mismo: saber distinguir lo que de verdad es importante de lo que no. A pesar de la dureza física de algunas etapas seguirás adelante para alcanzar la meta. El Camino de Santiago muestra el poder del ahora del que tanto se habla para vivir el presente sin preocuparse en exceso del futuro.
Conocer gente nueva
Para compartir la experiencia llegando desde cualquier parte del mundo. Eso sí, hay quien decide caminar solo. No obstante, el compañerismo, la solidaridad y espíritu del peregrino se percibe igualmente, así como la hospitalidad de los habitantes en cada parada del recorrido.
Se puede adaptar
Según las capacidades de cada persona se elegirá una ruta u otra. El punto de partida no es fijo, lo único que no varía es el destino: la catedral de Santiago de Compostela. Ten muy presente que el Camino de Santiago no se trata de una prueba deportiva por lo que no es necesario forzar tus límites.
Descubrir lugares
Que de otro modo no visitarías. Puentes, calzadas romanas, sendas milenarias, iglesias, albergues, restaurantes…
Recordarlo toda la vida
Cualquier peregrino te dirá que después de recorrer el Camino de Santiago la experiencia nunca se olvida. Por algo hay quien lo repite al haber más de una ruta o que incluso repite por las mismas etapas porque cada vez tiene algo especial.
Fuente: Vive Camino